Para conocer donde descansan los restos de San Onofre haz click aquí.
 

T e r c e r   D í a

Glorioso y bienaventurado San Onofre; tu confundes mi tibieza, mi amor propio y mi apego a las cosas transitorias, con aquel santo fervor y grande amor tuyo a Jesucristo, nuestro Salvador, por el cual preferisteis, ante que ofenderle, dejar tu patria e intereses temporales, los amigos y aún las comodidades de una vida en el mundo, entregándote a la vida mortificada del desierto: Intercede, pues, glorioso santo, con el mismo Señor del Cielo para que imitando yo tu vida mortificada y tu prudencia admirable, cumpla el primer mandamiento de la ley de Dios, amándola siempre y sirviéndole con fidelidad en esta vida, merezca gozarle en tu compañía, para siempre en el cielo. 

Amén.